Publicado en el diario Clarín el 6 de julio de 2022 este interesante artículo sobre la presencia de pobladores argentinos antes de la usurpación británica en las islas Malvinas.
LA PRESENCIA NACIONAL EN MALVINAS ANTES DE LA USURPACIÓN
por Facundo Rodríguez (Abogado, especialista en derecho internacional, magister en relaciones internacionales, docente universitario).
El pasado 23 de junio tuvo lugar una nueva sesión del Comité
de Descolonización (C-24) de la ONU y se trató, como cada año allí, la Cuestión
de las Islas Malvinas y se aprobó por consenso la 50ª resolución en el ámbito
de la organización donde se llama a la Argentina y al Reino Unido a reanudar
las negociaciones para poner fin a la controversia de soberanía a efectos de
terminar con esta especial y particular situación colonial.
Como cada año, el Reino Unido no se hace presente a
enfrentar sus obligaciones. Sin embargo, asistieron dos habitantes de las Islas,
quienes en un lapso de seis minutos apelaron a todo tipo de falacias e
inexactitudes.
Lo más llamativo es la novedosa tendencia de la elite
británica de las islas de negar toda presencia argentina antes de la usurpación
de 1833. No solo eso, sino que en un editorial del “Penguin News” -único diario
de las Islas- van más allá y sostienen que antes de los británicos solo se
encontraban en las Islas grupos de “zorros malvineros”.
El objetivo es claro: pretender demostrar que no había
población argentina y que como tal no hubo una expulsión. Sin embargo, la
realidad es totalmente distinta.
Desde el momento mismo de la emancipación, la Argentina
consideró a las Malvinas como propias. A solo cinco días de la Revolución de
Mayo comenzó a ejercer su soberanía sobre las Islas y hasta 1833, fecha de la
expulsión de las autoridades y la población argentina por parte del Reino
Unido, Buenos Aires realizó innumerables actos de soberanía de forma pública,
pacífica y de buena fe.
Desde la toma de posesión oficial y el primer izamiento de
nuestra bandera en 1820, hasta la creación de la Comandancia Político y Militar
de las Islas Malvinas en donde tuvo lugar el primer matrimonio civil en la
historia argentina, se realizaron concesiones de terrenos y ganados, se fundaron
estancias y dos poblados, se emitió moneda, se realizaron procedimientos
penales, tuvo lugar el primer nacimiento bajo soberanía de un Estado.
Llegaron a habitar las Islas hasta 300 personas bajo la
soberanía argentina y 150 de forma permanente. Nunca, hasta ese entonces, las
Islas habían tenido tal desarrollo humano.
Fue la joven nación argentina la que produjo el mayor
desarrollo humano de las islas en toda la historia y demostró la utilidad de
las islas, y fue el Imperio Británico, con su supremacía política, militar y
económica, quien violando el derecho internacional se aprovechó por la fuerza
de este inmenso esfuerzo.
Los actuales habitantes de Malvinas son producto del vicio
de origen de 1833 que descarta toda argumentación británica sobre la pretendida
aplicación de la libre determinación de los pueblos a la población que el Reino
Unido estableció como consecuencia de su usurpación. Si hay un pueblo víctima
de la acción colonial al cual el principio de libre determinación es aplicable
en la cuestión Malvinas, ese pueblo es el pueblo argentino.
En las islas existen tradiciones propias, muchas de ellas
son producto de la presencia argentina en las Islas previo a la llegada de los
colonos británicos. Al campo lo llaman “the camp”, como en castellano “campo”,
en lugar de “countryside”; el uso del vocablo “chay” derivado de nuestro “che”;
nombres como “Estancia” o “Bombilla”; la presencia de corrales elaborados por
nuestros gauchos.
Querer borrar el pasado y pretender rescribir la historia es
un típico accionar colonial. Lo sorprendente es que aun en pleno siglo XXI se
intente apelar a este tipo de bajezas para justificar lo injustificable.