Publicado en el Periódico El Restaurador - Año III N° 9 - Diciembre 2008 - Pag. 15
Recordando...
El 5 de marzo de 1964 y mediante
Que
resulta oportuno honrar con tal motivo, el nombre de uno de los forjadores de
la nacionalidad, propósito tanto más conveniente al interés cívico, cuanto que
la provincia a que esta ciudad pertenece ha sido una de las últimas en
integrarse como estado federal dentro de la vasta patria argentina;
Que
los próceres de
Que
dicha Confederación fue sostenida por su fundador durante más de dos decenios
luchando contra confabulaciones internas y coaliciones extranjeras en
condiciones que hubieran desalentado a cualquier otro gobernante o jefe
militar;
Que
el mismo Brigadier General fue el primero en bregar por los objetivos que
orienta el actual pueblo argentino al postular y defender los principios de una
nación socialmente justa, económicamente libre y políticamente soberana;
Que
en efecto, el excelentísimo señor Gobernador de la provincia de Buenos Aires,
don Juan Manuel de Rosas creó mediante sistemas inéditos de producción de
bienes y distribución y comercialización de los mismos, fuentes útiles de
trabajo para el hombre de campo y proletario, mejorando sensiblemente el
“bienestar general” a que alude
Que
el estanciero, industrial y exportador don Juan Manuel de Rosas fundó la
denominada por nuestras fuerzas vivas “industria madre del país” o sea la
ganadería, cuyos productos exportó al exterior en barcos de bandera argentina,
pertenecientes a la primera flota mercante argentina nacional, tan sólo
superada en tonelaje en 1943;
Que
dignificó al trabajador y proletario al asumir con nacional orgullo el nombre
de “gaucho” conque se designaba despectivamente al humilde de entonces;
Que
hizo respetar dicho nombre ante los poderosos de la tierra en virtud del
ejercicio de la inteligencia y de las armas;
Que
postuló la primera ordenanza de independencia económica nacional mediante la
famosa Ley de Aduanas de 1835 por la cual esclareciera controles financieros y
el proteccionismo de nuestras industrias y artesanías;
Que
hizo profesión permanente de honrarse “con la amistad de los pobres” y vivir
alejado del privilegio de la llamada oligarquía porteña;
Que
arrancó centenares de leguas al desierto y fundó los centros de civilización de
Bahía Blanca, Junín y 25 de Mayo;
Que
durante doce años de conflictos internacionales defendió con inmortal dignidad
la soberanía argentina, sosteniéndola “íntegra e inmaculada como salió de las
manos del Todopoderoso” y cumplió e hizo cumplir por primera vez en los hechos
el juramento del 9 de Julio de 1816;
Que
decretó fiesta nacional el 9 de julio;
Que
gozó de la admiración de los primeros estadistas y publicistas del mundo de su
época, quienes lo consideran el campeón de los derechos de la soberanía de Sud
América;
Que
rodeó de dignidad el nombre argentino por su intachable conducta en la vida
personal y privada y el manejo escrupuloso de los fondos públicos;
Que
robusteció los fueros de
Que
hizo del Ejército Argentino un organismo técnico proveyéndolo de industrias y
laboratorios y constituyendo las bases de fabricaciones militares en los
cuarteles y talleres modelos de Santos Lugares;
Que
convirtió nuestra incipiente diplomacia en un cuerpo de profesionales y
especialistas en política internacional y en el arte de la negociación, tales
como Arana, Guido, Manuel Moreno y Mariano Balcarce;
Que
el brigadier general don Juan Manuel de Rosas fue un hecho y una etapa de
nuestra vida nacional que nadie puede dejar de reconocer;
Que
fue el primero en honrar al Padre de
Que
con la presente resolución se cristaliza uno de los deseos del Padre de