sábado, 1 de septiembre de 2012

Combate de Costa Brava

   Publicado en el Periódico El Restaurador - Año VI N° 24 - Setiembre 2012 - Pags. 1 y 2   

Un episodio de la gloriosa Guerra del Paraná

COMBATE NAVAL DE COSTA BRAVA - 15 Y 16 DE AGOSTO DE 1842

                                                                                 Por Guillermo M. Masciotra

El almirante Guillermo Brown al mando de la Flota de la Confederación Argentina, derrota completamente a la segunda escuadrilla riverista al mando de José Garibaldi en el Río Paraná.

Guillermo Brown
Daguerrotipo del Alte Brown (1856) - M.H.N.


Antecedentes históricos. La diplomacia de las cañoneras

Todo fracasa para el intento colonialista francés de 1838, que bloquea el Río de la Plata y ataca Martín García (ver ER Nº 8), Zárate y Arroyo del Sauce, que suma como aliados a los emigrados unitarios, y las tropas orientales coloradas de Fructuoso Rivera. Pero, en marzo de 1839 la caballería entrerriana de la Confederación Argentina al mando del Gral. Justo J. de Urquiza derrota completamente en la Batalla de Pago Largo, a Berón de Astrada, que muere junto a 800 de sus hombres de las fuerzas correntinas, e impide la vigencia del Tratado entre Fructuoso Rivera y la Provincia de Corrientes. Previamente el Gobierno de Fructuoso Rivera había declarado la guerra a la Confederación Argentina.

Los emigrados unitarios al ver este fracaso, convencen al Gral. Juan Galo de Lavalle de la necesidad de invadir el territorio patrio, siempre con la descarada colaboración gala de naves, armas y equipos. Continuaba la política de las potencias coloniales queriendo imponer la diplomacia de las cañoneras.

La expedición del Gral. Lavalle transportada por buques franceses a las costas de la Provincia de Buenos Aires, se retira al norte casi sin combatir y el Gral. Prudencio Rosas rápidamente sofoca la intentona de los hacendados del Sur de la Provincia de Buenos Aires.

Las Campañas Navales de la Banda Oriental.

En 1840, cambia para Francia su escenario geopolítico y ahora ve el peligro británico en Medio Oriente, firma el Tratado Arana–Mackau (ver ER N° 17), levanta el bloqueo de cerca de 950 días de duración y se retira de estas regiones, pero así comienza la Campaña Naval de la Banda Oriental en 1841.

Rivera, por su parte decide seguir su guerra contra la Confederación Argentina e incluso llevarla a Corrientes. Rápidamente los emigrados unitarios, los ingleses y franceses lo apoyan y pretenden la libre navegación de los ríos interiores.

El Gobierno de la Confederación Argentina se consolida en ambas márgenes del Río de la Plata, y Juan Manuel de Rosas comprende que es necesario nuevamente establecer el poder naval argentino. Para ello convoca al Almirante Guillermo Brown, que contaba con 64 años de edad, sin lugar a dudas una carga importante de años, sacrificios y luchas, pero su gran lucidez, trabajo y capacidad de mando, hacen que de la nada como en las campañas navales de 1814 (contra los realistas) y 1826 (contra los brasileros), arme nuevamente una flota con naves poco homogéneas, armamento dispar e improvisando soluciones para tripular las mismas.

Se sumaron a la convocatoria del bravo irlandés, varios de sus anteriores oficiales, Juan Bautista Thorne, José María Pinedo, Álvaro José de Alsogaray, Nicolás Jorge y Guillermo Bathurst entre otros; merece destacarse la conducta del irlandés Juan King, veterano de la Guerra contra el Imperio, que enfermo, se presentó voluntariamente para defender la soberanía nacional. En tan solo 90 días la enseña nacional flameaba nuevamente al tope de las naves y lista para escribir otro glorioso capítulo de las luchas navales.

Primera Campaña

Combate de Costa Brava
John Halstead Coe

La primera flota oriental riverista al mando de John Coe, antiguo subordinado de Brown en 1826, es completamente derrotada en aguas del Plata, en una serie de combates navales que se desarrollan a partir del 24 de mayo de 1841. Coe se aleja de Buenos Aires y busca la protección de las baterías de Montevideo. Obligado a salir del puerto por el cerco que establece Brown, los navíos riveristas son derrotados en los combates de Punta Brava y Santa Lucía, sumándose a esto la deserción de alguna nave que se pasó a las órdenes del bravo almirante Brown, definieron la absoluta supremacía de la Confederación Argentina en el Río de la Plata.

Segunda Campaña

Pero siguen los intentos de segregar a la Provincia de Corrientes de la Confederación y en 1842 Rivera contrata a José Garibaldi para que al mando de una segunda división naval intente llegar y apoyar a Corrientes. El destino del italiano Garibaldi sería idéntico como veremos al intento de la anterior flotilla de Coe, nuevo despilfarro de naves, recursos y tropas para disputar el poder naval y derrotar a Brown y luego a la Confederación Argentina.

A tal efecto en Junio de 1842, la flota riverista al mando de Garibaldi, se presenta frente a Martín García, utilizando el ardid de identificar sus naves con bandera argentina, fuerza la posición sin combatir. Tardíamente advertido el engaño, las baterías nacionales abren fuego desde la isla, pero las naves invasoras se alejan aguas arriba.

El bombardeo es escuchado en la rada Buenos Aires, y el Almirante Brown, embarcando en el Belgrano ordena la salida de sus buques, lamentablemente por una fuerte bajante, esta embarcación queda varada en el Arenal Grande, y así la flota incursora continúa libremente subiendo por el Paraná.

El genio naval del irlandés brilla nuevamente, ya que logra salir de la varadura y como en 1814 que encierra a las naves realistas de Romararte en el Río Uruguay y años más tarde en el Combate Naval del Juncal contra el Imperio de Brasil, divide sus fuerzas creando una Segunda División al mando de Juan Bautista Thorne con tres naves el Belgrano, el 25 de Mayo y el San Martín, cortándole a Garibaldi toda posibilidad de recibir refuerzos desde Montevideo e impidiéndole también la salida por el Río de la Plata. Inicialmente Brown pensó que los invasores estaban aguas arriba del Río Uruguay, pero le llegó la información que su subordinado Juan F. Seguí, con unos lanchones se había enfrentado con el enemigo al sur de la Ciudad de Paraná; a toda prisa cambia el rumbo, remonta el Paraná y comienza la persecución. En las cercanías de la localidad de Esquina, Garibaldi comienza a comprender lo peligroso de incursionar un territorio hostil y no poder, ni tampoco, saber salir. La superioridad marinera de Brown le obliga a Garibaldi a combatir en aguas desfavorables, así entre el 15 y el 16 de agosto de 1842, ambas fuerzas se enfrentan en el Combate de Costa Brava, produciéndose un claro triunfo de la flota de la Confederación.

En este Combate, las naves nacionales fueron impulsadas en algunos casos desde tierra por sirgadores debido a la falta de viento y escasa profundidad, resistieron a los tiradores emboscados en las costas, siendo estos desalojados y perseguidos por tierra y agua. Los navíos argentinos ganaron las posiciones más favorables en un estrecho canal, con el Echagüe, el 9 de Julio y la Chacabuco en línea, mas el apoyo mutuo entre las naves, significó Costa Brava una victoria completa para la Confederación Argentina, con pérdidas casi insignificantes frente al enemigo que tuvo bajas de un tercio de sus hombres y todas las naves destruidas o capturadas.

La enorme alegría de la victoria en el Combate de Costa Brava produjo en Buenos Aires una recepción jubilosa para el bravo irlandés, que fue recibido en el puerto, por la población encabezada por Manuela Robustiana Rosas y por su esposa Elisa. Esta victoria además de consolidar la posición política y militar de la Confederación Argentina, resaltó también la gran nobleza de Brown  que dejó huir a Garibaldi, pensando que nunca más atentaría contra nuestra soberanía, sin embargo al poco tiempo nuevamente con apoyo riverista y anglofrancés, volvería con sus correrías y saqueos por nuestras costas y matando a sus habitantes que le perdonaron la vida en Costa Brava.

 

Fuentes:

Busaniche, Jose Luis. "Historia Argentina".

Caillet Bois, Teodoro. "Los Marinos de la dictadura".

Galmarini, Hugo. "Tomas Guido".

Harguindeguy, Pablo. "Apuntes sobre buques de la Armada Argentina".

Instituto Nacional Browniano."Los Bloqueos Navales en el Rio de la Plata".

O'Donnell, Mario. "La Gran Epopeya".

Piccirilli, Ricardo y Gianello, Leoncio, "Biografías  Navales".

Ruiz Moreno, Isidoro. "Campañas Militares Argentinas".

Saldías, Adolfo. "Historia de la Confederación Argentina".

Tanzi, Hector. "Historia Marítima Argentina".

Combate de Costa Brava
Juan Francisco Seguí


Las características de las naves Argentinas que participaron en el Combate Naval de Costa Brava.

Bergantín ECHAGÜE, (ex Cagancha capturado en 1841 a la primera flota riverista) de 165 toneladas, armado con 16 cañones, comandado por el Teniente José María Pinedo.

Goleta CHACABUCO, de 180 toneladas, armamento 3 cañones, al mando del Teniente Nicolás Jorge.

Goleta ARGENTINA de 115 toneladas, armada con 7 cañones, al mando del Capitán Juan Francisco Seguí

Bergantín Goleta VIGILANTE de 70 toneladas ,armado con 10 cañones, 70 tripulantes. Bajo el mando del capitán Celestino Elordi.

Goleta 9 DE JULIO (ex PALMAR capturado también a la primera flota riverista) de 70 toneladas, armado con tres cañones. Pequeña embarcación al mando del Teniente Eduardo Brown.