martes, 1 de marzo de 2016

Atributos presidenciales

  Publicado en el Periódico El Restaurador - Año X N° 38 - Marzo 2015 - Pag. 5 

 Bicentenario de la Declaración de la Independencia de las Provincias Unidas de Sud América  el  9 de Julio de 1816 

 Atributos presidenciales.

Asunción del mando de Juan Domingo Perón
Perón recibe de manos del presidente Farrell, los atributos del poder -bastón y banda-
en el salón Blanco de la Casa Rosada, ante la atenta mirada del busto de la República


La banda y el bastón de mando

Por el Decreto - Ley N° 10.302/1944 el presidente Farrell estableció como debía ser la banda presidencial: "La banda que distingue al Jefe del Estado, autorizada por la Asamblea Constituyente en la reforma de estatuto provisorio del Gobierno del 26 de enero de 1814 y alcanzada por la distinción del 25 de febrero de 1818, ostentará los mismos colores, en igual posición y el sol de la Bandera Oficial. Esta insignia terminará en una borla sin otro emblema. Tanto el sol como la borla serán confeccionados con hilos, con baño de oro, de óptima calidad y máxima inalterabilidad en el tiempo". 

Debe colocarse sobre el hombro derecho, cayendo y cruzando el pecho hasta el costado izquierdo, de modo que se hace bien visible.

La banda que mide 76 cm. aproximadamente de largo, dobles, por 10 cm. de ancho, está hecha en una misma pieza de tela de color azul cielo y blanca, dividida en tres franjas horizontales iguales, siendo las exteriores de color azul cielo y la del medio, blanca, terminada en borla de oro de 12 centímetros de largo con flecos de 19 centímetros, sin ningún otro aditamento o emblema. El color del sol es amarillo de oro y tiene 4 centímetros de diámetro, con rayos flamígeros y rectos de dos y medio centímetros de largo, bordado en hilos de oro.

Perón fue el primer mandatario en recibir la banda presidencial luego de su reglamentación, ya que con anterioridad, generalmente existían distintos modelos, en las cuales muchas de ellas tenían el escudo nacional, en vez del sol. 

Contrariamente a lo que ocurre con la banda, no existe disposición ni reglamentación alguna que establezca como debe ser el bastón de mando y los materiales con los cuales debe ser fabricado, dependiendo ello del pedido del futuro presidente y del gusto del artista encargado de la obra.

Cada presidente que asume, recibe una banda y bastón nuevos, que le pertenecen, aún cuando cesan o finalizan en sus mandatos, si bien los expresidentes o sus familiares tradicionalmente donan estos atributos al Estado para ser exhibidos en los museos.


La marcha de Ituzaingó

Otro de los atributos del cargo del Presidente es la Marcha de Ituzaingó, que es la pieza musical que se debe ejecutar a la llegada del Mandatario en todos los actos oficiales en los que interviene, si bien actualmente esa costumbre ha caído en desuso. 

Esta pieza de carácter instrumental, fue posiblemente compuesta por el emperador del Brasil don Pedro I, quien era un compositor aficionado, para ser ejecutada después de ganar la primera victoria que los imperiales pretendían  obtener sobre las fuerzas argentinas y aliadas en la guerra que ambos países sostuvieron entre los años 1825 a 1828.

Pero en la decisiva y gloriosa batalla de Ituzaingó, la suerte de las armas les fue adversa y las fuerzas imperiales fueron derrotadas por las argentinas, al mando de Carlos María de Alvear. En el campamento abandonado por los brasileros fue encontrado además de todo tipo de material de guerra, como armamento, vituallas, imprenta y varias banderas, la partitura de la marcha con una nota que decía: "Para ser tocada después de la primera gran victoria que alcancen las tropas imperiales, debiendo darse a esta marcha el nombre del campo en que se libre la batalla". Según algunos, la partitura estaba en un cofre y para otros se encontraba en una valija. La marcha fue adoptada por los argentinos para conmemorar el evento y también para homenajear al presidente. La de Ituzaingó es una de las marchas más lindas del repertorio militar argentino y se la llamó así por el nombre del lugar donde se desarrolló esta decisiva batalla, cumpliéndose así con el deseo del compositor de la obra.

Desde el 26 de enero de 1946 hasta el 28 de agosto de 1959, la marcha fue sustituida por la Marcha de San Lorenzo como atributo presidencial.