sábado, 1 de junio de 2013

Garibaldi: ¿Héroe o pirata?...

  Publicado en el Periódico El Restaurador - Año VII N° 27 - Junio 2013 - Pag. 14 

Giuseppe Garibaldi
Giuseppe Garibaldi

GARIBALDI: ¿Héroe o pirata?...

Un dilema para los argentinos de ascendencia itálica.


por Waldemar  M. Caruso

 


El interesante y fundado artículo sobre Garibaldi, aparecido en el N° 24 de este periódico y que firma "El Federal Apostólico", me ha movido a escribir estas líneas.

Históricamente coincido en un todo con el autor, tanto en el significado de los hechos que narra como las fechas y ulterioridades detalladas en el mismo.

Es sabido que los inmigrantes provenientes de Europa -al contrario de lo que deseaba Sarmiento-, eran personas sin instrucción alguna, solo con ganas de trabajar y "far l'América"... No es menos cierto que aún, el más instruido italiano como el analfabeto, sabían quién era Garibaldi, por lo menos en lo básico: logró la unificación de Italia, territorio hasta entonces gobernado en un setenta por ciento por el Papa y el resto por coronas extranjeras, incluida la española.

Llegados a América, en nuestro caso la Argentina, venían con ese sentimiento nacionalista itálico.

Cuando las autoridades del país, de principios del siglo XX deciden homenajear al héroe máximo italiano, no es necesario hurgar en añosos papeles de noticias (diarios) para ver el fervor con que los "tanos" ricos -una minoría- y los otros, la mayoría "laburantes" que apenas chapurreaban español, recibieron la noticia. Desde un Antonio Devoto hasta un idealizado "Giuseppe el zapatero"...

La revista Caras y Caretas con excelentes fotos inmortalizó el homenaje a Garibaldi.

Giuseppe Garibaldi
Monumento a Giuseppe Garibaldi


AQUI VIENE EL POR QUÉ del homenaje (a mi humilde forma de pensar). Garibaldi era masón, al igual que Mazzini el de la Joven Italia y otros no tan conocidos por estos lares. Las autoridades gubernativas de nuestro país, también lo eran. 

Desde el "presidente" Rivadavia y siguiendo la lista: Urquiza (Grado 33, ver Museo Saavedra), Derqui, Mitre, Sarmiento, Avellaneda y siguen los nombres (incluido el vicepresidente de Perón, el Contralmirante Tessaire), "La Logia" estuvo presente en nuestra historia.

En esos homenajes se quedaba bien con todo el mundo: con los intelectuales argentinos e italianos, integrantes del Poder (stablishment) y el vulgo "laburante" que veía con alegría que a "su" máximo héroe se lo homenajeaba como en la "lontana terra".

Masón el héroe, masón el presidente, masones la mayoría de los integrantes del verdadero poder... "Entre bueyes no hay cornada". Todo quedaba en casa. ESE ES EL FUNDAMENTO, A MI ENTENDER, DEL HOMENAJE A GARIBALDI CON SU ESTATUA Y ACTOS CONSIGUIENTES. Era "uno de los nuestros" y "nosotros somos el país"... o no?... (Por lo menos eso pensaban aquellos argentinos de la generación del 80 o antes, cuyos nombres figuran en la nomenclatura urbana). Sobre el alto porcentaje de masones honrados en la vía pública, la gente común no tiene ni idea de cuántos son, ni quiénes eran en realidad.

Muy bueno el artículo del "Federal Apostólico", me adhiero, repito. Pero insisto: había un motivo en el homenaje mucho más allá de la historia argentina, cuyos hechos estaban frescos en la memoria colectiva en esos días.