Publicado en el Periódico El Restaurador - Año IV N° 15 - 25 de Mayo de 2010 - Pags. 1 a 5
EDICION DEL BICENTENARIO DE LA REVOLUCIÓN DE MAYO
Sus
antecedentes en Europa y América –
Por El Federal Apostólico
Cornelio Saavedra. Óleo de B. Marcel. MHN (1) |
Antes de analizar esos antecedentes,
es necesario conocer cual fue la situación jurídica de los Reinos de Indias, tal
el nombre como se llamó a estos territorios españoles en América.
La
expedición de Cristóbal Colón que tenía como destino a las Indias, como todos
sabemos, fue financiada por Isabel
También
debemos saber que por el Tratado de Tordesillas, suscripto por lusitanos y
castellanos el 7 de junio de 1494, éstos se repartieron las nuevas tierras,
trazando una línea imaginaria sobre el
océano Atlántico, de polo a polo, trescientas setenta leguas al oeste de las
islas de Cabo Verde. De esa línea hacia el oriente las tierras a descubrir eran
para Portugal, hacia el occidente para la corona castellana.
En
1519, Carlos I de España –conocido también como Carlos V (de Alemania)– expidió
una Real Cédula, estableciendo la política de los “dos hemisferios”, según la
cual
Estos
son conceptos que debemos tener claros para poder interpretar los hechos de
Durante
el último tercio del Siglo XVIII y los primeros años del Siglo XIX se
producirán en Europa y América hechos políticos, militares y económicos, que
tendrán su repercusión –como veremos– en el Río de
El
mundo de entonces era muy distinto del actual, su centro estaba en Europa y
prácticamente los otros continentes no gravitaban en la política de aquella
época. El sistema monárquico era el que imperaba y en la misma Europa, hoy
grandes países como Alemania e Italia, no habían logrado su unidad, ya que
ambos se encontraban divididos en distintos reinos, estados y principados que
guerreaban entre sí. Otros no habían obtenido su independencia –por ejemplo
Bélgica, Grecia, etc.–
El
8 de agosto de 1776 el rey español, Carlos III, decidió mediante real cédula,
la creación de un gobierno autónomo en la parte sur del continente americano,
llamado el Virreinato del Río de
En el mes de julio de ese mismo año,
se había producido al norte del continente, la declaración de la independencia
de las trece colonias inglesas, que se habían insurreccionado dos años antes y
que habían contado para ello con la ayuda de Francia y España, unidas estas por
un “Pacto de Familia”, ya que los reyes de estos países pertenecían a la misma
casa real, los Borbones. Esos nuevos estados independientes se dieron once años
mas tarde una constitución federal, estableciendo un régimen republicano de
gobierno. Ello ejerció también su influencia en algunos intelectuales de la
sociedad porteña, instalando en muchos de ellos la idea de la independencia.
En
Europa y mas precisamente en Inglaterra, la creación en 1764 de la primera
máquina a vapor y el desarrollo de las máquinas de hilar entre otros, originó
en ese país una verdadera revolución que se conoce en la historia como
En
1789 se produjo en Francia un hecho que conmovió a la sociedad europea, con
gran repercusión posterior, fue la llamada “Revolución Francesa”, de neto corte
liberal y burguesa, que destronó a la dinastía Borbón, terminando sus días Luis
XVI y su consorte María Antonieta bajo los efectos de la guillotina,
instaurándose
La
revolución francesa, desembocó posteriormente en el Directorio y luego en el
Consulado, siendo Napoleón designado cónsul por diez años a partir de 1799 y
posteriormente en 1804 se le ofreció la corona imperial, estableciendo el
Imperio. De esta forma irrumpió Napoleón Bonaparte en la historia del mundo.
Si
tenemos en cuenta que en aquella época el mar era la vía de comunicación entre
los distintos continentes, podremos advertir que quien tenía su dominio, no
solo se aseguraba la comunicación de la metrópolis con sus territorios
ultramarinos, sino que prácticamente tendría también en cierta forma el dominio
del mundo, obstaculizando a su vez el accionar y el comercio de los otros
países enemigos. Así las grandes potencias de aquél momento –Francia, España e
Inglaterra principalmente– tendieron a la formación de grandes flotas. Las
armadas combinadas de Francia y España, que tenían como objetivo la invasión de
las Islas Británicas, fueron derrotadas el 21 de octubre de 1805, por la flota
inglesa en Trafalgar, frente a Cádiz.
Con
esa victoria, Inglaterra se convirtió en la “Reina de los Mares”, que le
permitió afianzarse como primera potencia marítima mundial –que lo fue durante
todo el siglo XIX y principios del XX– continuando y logrando mas tarde su
expansión imperialista por todo el mundo.
Todo
ello –las consecuencias de la revolución francesa, la derrota de la armada
franco española entre otros hechos– produjeron en España, especialmente para
nuestro estudio, una conmoción que repercutió también en
El
artículo del Dr. Oscar Denovi que se publica en este periódico esclarece todos
esos hechos que se desarrollaron en el viejo continente y por lo tanto no vamos
a repetirlos aquí, sino solamente nombrarlos: El bloqueo impuesto por
Inglaterra al continente europeo en manos de Napoleón y la réplica de éste
imponiendo el bloqueo a las islas británicas; la decadencia de la casa reinante
en España; el manejo de los asuntos de estado español, por Manuel Godoy,
favorito de la reina María Luisa; la alianza franco española para la invasión a
Portugal, aliada a Inglaterra, permitiendo el paso por su territorio de las
tropas francesas; los escándalos de la familia real; el amor del pueblo por el
príncipe Fernando (futuro Fernando VII) y por ello llamado “El Deseado”; el
traslado de la corte portuguesa al Brasil; la abdicación de Carlos IV a favor
de su hijo Fernando VII; la farsa de Bayona y el levantamiento del pueblo
madrileño contra los franceses en mayo de 1808, iniciando así lo que se llamó
la guerra de la independencia española.
Simultáneamente
con los sucesos que tenían lugar en España a principios del S. XIX y con la
finalidad ya mencionada de obtener nuevos mercados proveedores de materias
primas y a su vez poder introducir sus manufacturas, sobre todo después de
perder sus trece colonias en el norte de América que se independizaron –como ya
mencionamos–, Inglaterra atacó y tomó a principios de 1806, la colonia
holandesa del Cabo de Buena Esperanza en la actual Sudáfrica, que le sirvió de
trampolín después para intentar la conquista de
En
las memorables jornadas de
A
partir del inicio de la sublevación de los madrileños en mayo de 1808 y el
inicio de la guerra franco española, se produjo el cambio de la alianza de
España pasando a ser Inglaterra su nueva aliada, esta vez en su lucha contra
los franceses. Con la virtual prisión de Carlos IV y Fernando VII en manos
francesas, Napoleón ofreció la corona de España y las Indias, a su hermano
José, quien la tomó con el nombre de José I. El poder real español legítimo, con la “prisión” de Carlos IV y Fernando VII
quedó acéfalo y el pueblo reasumió su soberanía, creándose en la parte libre
del territorio español, diversas Juntas en distintas ciudades, con el fin de
llevar la guerra a los franceses, siendo la más importante
¿Qué
estaba pasando mientras tanto en América?
Santiago de Liniers (2) |
El
10 de febrero de 1807, frente a una nueva defección de Sobremonte, pero esta
vez en Montevideo, que cayó en poder de los ingleses, el Cabildo de Buenos
Aires y una Junta de Guerra convocados por Liniers, procedieron a suspender en
el cargo a Sobremonte, alegándose su quebrantada salud, pero que en los hechos
significaba una verdadera destitución. Ese hecho, creará una falsa expectativa
en los ingleses –en cuyo poder se encontraba Montevideo–, quienes supusieron
que ello había producido una ruptura de Buenos Aires con España.
Durante
su estada en el Río de
Carlota Joaquina (3) |
Casi
simultáneamente, el 8 de mayo de 1808, llegará a Buenos Aires una Real Cédula
que confirmó a Liniers como virrey interino.
En
agosto de 1808 arribó a Buenos Aires, un enviado de Napoleón, quien solicitó el
acatamiento y juramento de fidelidad a José I. Ese enviado, después de hablar
con Liniers será reembarcado al día siguiente de haber arribado, sin lograr su
cometido. A mediados de mes, Liniers comunicó al pueblo la situación creada en
España y se realizaron las ceremonias de acatamiento a Fernando VII, con gran
festejo popular.
Pero
la nacionalidad de Liniers despertó desconfianza en el gobernador de Montevideo,
Javier de Elío, quien solicitó al Cabildo y a
Martín de Álzaga |
Por
esa época también los Braganza, instalados en Río de Janeiro, pretendieron que
estos Reinos de Indias, se unieran a
No
obstante también existía en Buenos Aires, un grupo importante de personajes
influyentes que propiciaron que la princesa Carlota Joaquina, hermana de Fernando
VII de España y esposa de Juan IV de Portugal, que como ya dijimos estaba instalada
en Río de Janeiro, se hiciera cargo de estas tierras. A ese partido se lo
designa como “carlotino”.
Mientras
tanto en España, el pueblo español consideraba a Fernando VII, como su legítimo
rey y prisionero de los franceses. La resistencia española niciada en mayo de
1808 contra el invasor francés se acrecienta día a día. El 22 de enero de 1809,
Esa
Junta Central de Sevilla nombra como nuevo Virrey para el Río de
Baltasar Hidalgo de Cisneros (4) |
El
25 de mayo de 1809 se produjo en Chuquisaca un movimiento insurreccional (ver ER Nº 11, pág. 12) y el 16 de julio
otro en
En
España, los ingleses aportan recursos materiales y humanos en la lucha contra
los franceses y buscan la apertura de los puertos en el nuevo continente para
sus naves y manufacturas.
En
Buenos Aires, los ingleses solicitaron a Cisneros negociar mercaderías que no
habían podido introducir en Río de Janeiro, por encontrarse esa plaza atestada
de productos británicos. Previas consultas al Cabildo y al Consulado y acuciado
por problemas del Tesoro, el 6 de noviembre de 1809 Cisneros reglamentó el
libre comercio con buques extranjeros –léase ingleses–.
Por
diversos medios, llegaban a Buenos Aires noticias de la delicada situación
española, dando cuenta que España podía caer en poder de los franceses en cualquier
momento.
A
mediados de mayo de 1810, buques de guerra británicos traen ejemplares de “
Ante
tan alarmantes y conmovedoras noticias, el día 18 el Virrey se dirigió a los
habitantes de Buenos Aires, mediante una proclama en la que entre otras cosas decía,
que “en el desgraciado caso de una total pérdida de
Ante
la caída de España en poder de los franceses –que es lo que todos en aquel
momento creían muy posible– no era ilógico considerar que estas tierras pasaran
también al dominio napoleónico.
Se
había producido un vacío de mando, ya que la autoridad –
Muchos
vecinos y jefes de los cuerpos militares criollos se reunieron el 18 y 19 en la
jabonería de Vieytes y Rodríguez Peña, sopesando los pasos a seguir en la
emergencia, entendiendo que lo más apropiado era solicitar la convocatoria de
un Cabildo Abierto, para que el pueblo pudiera deliberar y determinar su suerte.
Invitación al Cabildo Abierto |
El
día 21 vecinos y milicianos del regimiento de Patricios con sus armas
comenzaron a reunirse en la plaza de
El día 22, las fuerzas militares fueron las que controlaron los accesos a la plaza, permitiendo sólo el ingreso a los convocados. En realidad, principalmente los Patricios, que eran quienes estaban a favor de lograr la separación del Virrey, fueron los que ejercieron ese control, ejerciendo una cierta selección permitiendo solo el ingreso de aquellos vecinos que querían la destitución de Cisneros.
Cabildo Abierto del 22 de Mayo (5) |
El
debate principal se desarrolló sobre la caducidad de la autoridad Soberana en
España.
A
continuación señalamos en breve síntesis, las cinco principales posturas esgrimidas
en la reunión.
El
Obispo de
Juan
José Castelli, basado en principios de las leyes de Indias y el derecho de
Castilla hacia estas tierras, argumentó que ante la disolución de
El
fiscal Manuel Villota argumentó que si bien el
pueblo del Virreinato había reasumido la soberanía, negó a Buenos Aires, el
derecho a invocar la representación de todo el territorio, a lo cual Juan José Paso, manifestó que la situación de emergencia imponía la
necesidad de la formación de una Junta Provisoria de Gobierno a nombre de
Fernando VII, debiéndose convocar posteriormente a los demás pueblos a enviar
sus representantes para la formación de un Gobierno permanente.
El
general Pascual Ruiz Huidobro, consideró que ante la emergencia debía asumir la
soberanía el Cabildo como representante del pueblo.
La
votación no fue secreta sino que lo fue a viva voz y quienes lo hicieron a
favor del Virrey Cisneros, recibieron abucheos, insultos y amenazas por el
público que seguía la sesión dentro y fuera del recinto del Cabildo.
Por
la mayoría de 158 sufragantes se dispuso la cesación del mando del Virrey
Cisneros y recaer éste en el Cabildo, hasta la erección de una Junta que había
de formar el mismo Cabildo, hasta tanto fueran convocados los representantes de
la provincias interiores para establecer la correspondiente forma de Gobierno.
Ese
día 23 al mediodía los capitulares procedieron al recuento de votos, formalizar
el acta, notificar al Virrey de la cesación en su cargo, y proceder a la
designación de
Al
día siguiente -24- en horas de la mañana quedó integrada
Por
la tarde se fijaron Bandos en toda
Para
algunos historiadores esta sería
Al
día siguiente, 25 de mayo, los cabildantes ante esa nueva situación vuelven a
reunirse, consultándose a los jefes militares, mientras grupos de personas
irrumpen pidiendo la destitución de Cisneros.
Los
comandantes de milicias expresaron que el disgusto era general y que el pueblo
y las tropas estaban en un estado de fermentación. Mientras tanto en el Cuartel
de los Patricios circulaba ya una lista con la nómina de la nueva Junta: Cornelio
Saavedra como Presidente, Vocales: Manuel Belgrano, Miguel Azcuénaga, Domingo Matheu,
Juan Larrea, Manuel Alberti y Juan José Castelli y como Secretarios, Juan José Paso
y Mariano Moreno.
La
lista se presentó al Cabildo con un petitorio de 400 firmas, -muchas de ellas
repetidas- 300 de las cuales pertenecían
a oficiales y soldados. Al atardecer de ese lluvioso día juraron sobre
No
podemos decir con propiedad que los sucesos que se produjeron con posterioridad
a las invasiones inglesas, fuera una confrontación entre españoles y criollos o
entre españoles peninsulares o europeos y españoles americanos. Todos se
consideraban españoles. Peninsulares y americanos había en uno como en el otro
bando. Esa misma situación se dará también durante las luchas por la
independencia, que se producirán en toda
Si
bien la idea de la independencia pudo haber existido en algunas mentes desde
La
figura descollante de los sucesos de Mayo, fue sin lugar a dudas el Comandante
de Patricios, Cornelio Saavedra, quien fuera designado por ese motivo,
Presidente de la llamada Primera Junta de Gobierno y quien en el Cabildo
Abierto del 22 de mayo, votara por la destitución del virrey, aclarando: “y no
quede duda que el pueblo es quien confiere la autoridad o mando”.
Todos
estos acontecimientos precipitarán años más tarde, en 1816, la declaración de
nuestra independencia.
Fuentes:
COURAU,
Robert, Historia pintoresca de España, Edic. 1973.
FURLONG
Guillermo, La revolución de Mayo, Edic. 1960.
LAFONT
Julio B., Historia de
PERRONE
Jorge, Historia Argentina, Edic. 1981.
SIERRA
Vicente D., Historia de