Publicado en el Periódico El Restaurador - Año XII N° 47 - Junio 2018 - Pag. 9
Pedro Subercaseaux |
Pedro León Maximiliano María Subercaseaux Errázuriz,
nació en Roma a fines de 1880, de padres chilenos.
Influenciado por su progenitor, que además de
embajador, era pintor, realizó estudios de arte en la Academia Superior de Arte
de Berlín, después en la Escuela Libre en Roma y más tarde en la Académie
Julian de París.
En 1907 se casó, compartiendo con su esposa el
gusto por las artes y la religión. Ambos con gran vocación religiosa, años
después solicitaron al Papa la autorización para que pudieran separarse y cada
uno pudiera dedicar su vida a Dios. Otorgada la autorización, en 1920, Pedro lo
hizo como monje benedictino en Inglaterra y su exesposa se recluyó en un
convento en Toledo.
En 1938 fue enviado de regreso a Chile para fundar
un monasterio benedictino en la ciudad Capital.
Falleció en Santiago de Chile el 3 de enero de
1956.
Fue un prolífico artista reconocido
internacionalmente por la calidad de sus obras, llenas de detalles, que denotan
un estudio previo de la escena y los personajes que intervienen en ella. Esas
pinturas por lo general de carácter religiosas o históricas atrapan la atención
de quien las observa, no pudiendo evitarse que se las admire y se las disfrute
desde todo punto de vista, ya sea por su alto contenido artístico, como desde
el punto de vista histórico, por la fidelidad guardada en el dibujo de vestimentas,
uniformes, armas y situaciones de guerra.
Si bien la mayoría de su producción artística corresponden a la historia chilena, hay muchas que reflejan hechos importantes de nuestra historia nacional como el óleo del Cabildo Abierto del 22 de mayo de 1810 en Buenos Aires; Entonación del Himno Nacional Argentino en casa de Mariquita Thompson; Retrato del Doctor Mariano Moreno; Batalla de Chacabuco; Abrazo de Maipú; varias sobre la batalla de Maipú, entre otras.
Además de pintor, fue caricaturista, dibujante en diarios y revistas y muralista.